En Bioparc Valencia la llegada de la primavera la anuncian los animales que comienzan a acrecentar su instinto animal. Los visitantes disfrutan de auténtica Naturaleza en abierto y pueden observar el comportamiento sexual y rituales de apareamiento de las diferentes especies.

Viernes, 02 de marzo de 2012.- Uno de los objetivos de Bioparc es la conservación, por lo que se destinan muchos esfuerzos en conseguir la reproducción de especies, especialmente las más amenazadas que forman parte de los 40 EEP’s (programas europeos de reproducción) en los que participa activamente Bioparc.

El nacimiento de crías como Tumai, un ejemplar de jirafa Baringo muy amenazada (entre 500 y 700 ejemplares en el mundo); o del chimpancé Kimbo, o de Tata la leona, o de driles, leopardos, lémures, y un largo etc. son éxitos en la reproducción animal que demuestran que un buen trabajo de los cuidadores y un control veterinario de los animales ayudan a cumplir uno de los objetivos de esta institución zoológica.

Recientemente llegaba a Bioparc, Zambé, un macho de cebra procedente de Francia. Su rápida aclimatación hizo que en poco tiempo se incorporase al grupo de hembras y saliese al exterior. Ahora está mostrando en Valencia sus dotes de reproductor probado, al cubrir a las hembras en celo.

Es una gran noticia el apareamiento entre los ejemplares de especies que todavía no se han reproducido en Bioparc. En el grupo reproductor de gorilas, Mambie, el joven macho muestra un gran interés y durante estos meses está montando a sus dos hembras. También Cirilo, un imponente macho de rinoceronte blanco, hace lo propio con las dos hembras.

Y mientras unas hembras se muestran receptivas a la llegada de la primavera, otras se preparan para traer al mundo el fruto de pasiones más tempranas, tras el correspondiente periodo de gestación, pues generalmente las crías comienzan a llegar con el buen tiempo, cuando la naturaleza se muestra más fértil para proporcionar la necesaria alimentación de los animales.