Nombre común:
Blesbok
Especie:
Damaliscus pygargus phillipsi
Familia:
Bovidae
Subfamilia: Antilopinae
Orden:
Artiodactyla
Clase:
Mammalia
Prog. de reproducción
ESB




En la sabana, en zonas de herbazales y llanuras de pastos.
Herbívora a base principalmente de gramíneas del género Themeda (en varias fases de crecimiento) y también de los géneros Eragrostis y Chloromelas.
Alrededor de 240 días.
23 años.
Grado de amenaza

BIOLOGÍA Y COMPORTAMIENTO:
Estos antílopes se identifican fácilmente por el color blanco de sus rostros que contrasta fuertemente con el marrón rojizo de sus cuerpos. Los blesboks se diferencian de los bonteboks (la otra subespecie) en que no presentan las nalgas y las patas blancas, en su caso, éstas son de un tono más claro que el resto del cuerpo y solo la parte inferior e interior de las patas son blancas. Los individuos jóvenes presentan tonos beiges en su coloración.
Ambos sexos poseen cuernos largos y curvados, en forma de lira, pero éstos son algo mayores en los machos.
Son animales de hábitos diurnos que pasan la mayor parte de la mañana y de la tarde pastando, mientras que emplean el mediodía y la noche para descansar.
Son gregarios y forman grupos de más de 25 individuos. A lo largo del año realizan migraciones en busca de los mejores pastos.
Se los ha observado gruñendo y resoplando a modo de señal de alarma. Las interacciones agresivas entre machos implican el choque de sus cuernos y pueden llegar a ser fatales.
CURIOSIDADES:
Tanto machos como hembras marcan objetos con secreciones procedentes de glándulas preorbitales, depositadas en los tallos de hierba para ser posteriormente esparcidas con los cuernos.
Los blesboks estuvieron muy amenazados en el siglo XIX a causa de la caza, su número pasó de grandes poblaciones a apenas unos dos mil individuos. Actualmente muchas poblaciones se han recuperado y se encuentran en una situación estable.