¿DE DÓNDE PROCEDEN LOS ANIMALES QUE VIVEN EN BIOPARC?

El deterioro del planeta y la alarmante pérdida de biodiversidad ha generado la necesidad de cambiar las estrategias conservacionistas que deben dirigirse a proteger, más allá de especies concretas, hábitats y ecosistemas completos. Paralelamente, es imprescindible conseguir un cambio de actitud en el comportamiento destructor de la especie humana. En este horizonte, los parques zoológicos cumplen un papel fundamental como salvaguarda de las especies y como verdaderas plataformas de transformación de conductas de la sociedad, acercando la belleza de la naturaleza a personas cada vez más desnaturalizadas, para que entiendan así la necesidad de protegerla.

Instituciones zoológicas como BIOPARC formamos parte de organismos como AIZA (Asociación Ibérica de Zoos y Acuarios) y EAZA (Asociación Europea de Zoos y Acuarios) que fueron creados para impulsar y coordinar la preservación de las especies. De esta forma, se prioriza la cooperación entre las instituciones zoológicas para promover el bienestar animal y la cría sostenible y genéticamente viable, así como facilitar la compartición de la investigación y el conocimiento científico.

Las instituciones zoológicas se convierten en “aliados de la biodiversidad” creando un marco de “trabajo en equipo” abierto, transparente y participativo, donde los animales no tienen un valor económico, no se compran ni se venden, sino que se intercambian entre ellas en aras de la preservación de las especies y el bienestar de los individuos.

¿CÓMO SE “TRABAJA EN EQUIPO”?

La cría sostenible controlada no puede abordarse individualmente por los parques pues no disponen del espacio suficiente para albergar el crecimiento de la población de animales y se enfrentan a riesgos importantes como aparición de enfermedades o los efectos de la consanguineidad si se reproducen individuos emparentados.

Para poder mantener poblaciones sanas y sostenibles se crearon los programas de reproducción de especies amenazadas en Norteamérica (1983) y en Europa (1985), que recogen la información de todos los animales de estas especies de todos los zoológicos tanto en Norteamérica (Asociación Americana de Zoos, AZA) como en Europa (European Association of Zoos and Aquaria, EAZA) y la gestiona conjunta y eficientemente. Cada especie dispone de un coordinador y un grupo de trabajo para analizar estos datos y establecer los cuidados óptimos en todos los sentidos, así como velar por la viabilidad genética diseñando el emparejamiento de los individuos y el destino de las crías. En este proceso, lógicamente, el beneficio de la especie y el bienestar de los individuos está por encima de todo y cada zoo cede la “propiedad” de “sus” animales asumiendo las directrices y decisiones comunes. Igualmente si un parque quiere incorporar una especie a su colección debe solicitarlo a los programas de reproducción, los cuales analizarán si reúne las condiciones apropiadas y determinará la idoneidad de los animales asignados.

Como ejemplos de este eficaz método de trabajo, BIOPARC Valencia ha llevado a cabo interesantes aportaciones. Por un lado, realizó una petición para incorporar Gorila occidental de costa, una especie emblemática desde el punto de vista de la conservación y que no podía contemplarse hasta entonces en la Comunidad Valenciana. Tras examinar la propuesta que incluía las adecuadas instalaciones y planteamiento de gestión a largo plazo, se otorgó el “honor” de albergar dos grupos de gorilas, uno de machos y otro reproductor lo que directamente suponía participar en el importante Programa Europeo de Especies Amenazadas (EEP) de esta especie. Los resultados han sido excelentes y el 26 de octubre de 2012 nacía Ebo, la primera cría.

Otro buen ejemplo ha sido la reproducción de la subespecie de jirafa Baringo. Ante la alarmante situación de la especie en su medio natural, se decidió trasladar a Valencia ejemplares “puros” que se unieron a la manada ya existente y los frutos no tardaron en llegar. Varios nacimientos han posibilitado que desde BIOPARC Valencia partan hacia otros centros individuos para crear nuevos grupos reproductores. Además, el trabajo del equipo técnico con el éxito en la alimentación “a mano” de algunas crías ha supuesto una magnífica fuente de información para otros zoos, lo que repercute de forma positiva en salvar a esta especie.

Esta ingente labor de cooperación que implica costosos traslados, viajes, análisis, documentos, diferentes requerimientos sanitarios y legales según los países, etc. se realiza sin ningún tipo de contraprestación económica. Esta gestión coordinada vela porque los animales tengan las mejores oportunidades de reproducirse en las mejores condiciones posibles y porque los zoos que participan los cuiden adecuadamente pues, en caso contrario se procede a la retirada de los mismos que se ponen a disposición de otra institución zoológica.

Diariamente nos enfrentamos a noticias sobre la extinción de especies y la pérdida de biodiversidad y, en este sentido, es fundamental que la sociedad entienda y apoye el papel que cumplimos los parques zoológicos. De forma activa ya se ha conseguido “salvar” especies que se encontraban extintas en estado silvestre reintroduciendo en su hábitat las crías nacidas en parques zoológicos, las preciosas gacelas Mohr que pueden verse en BIOPARC son muestra de ello son, en definitiva, un ejemplo de que todavía está en nuestras manos conseguir un planeta vivo y habitable para todas las especies.

El objetivo principal de BIOPARC es concienciar sobre la necesidad de preservar el medio ambiente, la conservación de la biodiversidad y de las especies animales amenazadas y este eje marca las actuaciones referentes a nuestra colección animal.