Esta singular especie dio origen al nombre de España, que significa “Tierra de damanes”.
El damán roquero (Procavia capensis) tiene una historia evolutiva muy sorprendente, pues este pequeño animal (orden Hyracoidea) de menos de 4 kg de peso, está estrechamente emparentado con los elefantes (orden Proboscidea).
Es «pariente» de los elefantes y podemos ver al grupo con las crías en el KOPJE de la Sabana africana.
Vive en hábitats áridos de sabanas, bosques de matorral y desiertos, en los que ocupa ambientes rocosos, como los Kopjes, que presenten una cierta cobertura vegetal y en los que haya grietas y cavidades que usan como refugio. Son animales diurnos y suelen vivir en colonias que van de cuatro a ocho individuos, pero cuando las crías han nacido, pueden incluso ser unos 25 ejemplares en toda la colonia.
Sólo podemos contemplar en España esta especie en BIOPARC Valencia y podemos verla en la espectacular recreación del Kopje, en la zona del aviario que incluye formaciones graníticas que les permite trepar y moverse entre las verticales rocas y realizar sus comportamientos naturales. Un grupo de nueve individuos comparten hábitat con diferentes tipos de aves y otras especies como el saltarrocas, un precioso antílope de pequeño tamaño cuyas diminutas pezuñas tienen la forma del pie de una bailarina de ballet clásico.
En estos días podemos ver a la familia de damanes de BIOPARC Valencia, disfrutar junto a las cuatro nuevas crías. Suelen gestar una vez al año y el periodo es de 212 a 240 días, pariendo entre una y seis crías. Su esperanza de vida es aproximadamente 12 años.
El término “Hispania” proviene del fenicio i-spn-ya que significa “Tierra de damanes” y según algunas teorías, los fenicios le dieron ese nombre porque la Península Ibérica estaba poblada por conejos, unos animales desconocidos para ellos pero que les resultaron similares a los damanes, muy abundantes en el Mediterráneo oriental. Así decidieron llamar a los conejos damanes y a esa nueva «tierra de conejos», “i-spn-ya”.